Copa de vino: ¿Cuál usar?

Existen distintos tipos de copa de vino específicas para cada caldo

¿Te consideras un buen enófilo? Si la respuesta es sí, estamos seguros de que sabes que existen distintos tipos de copa de vino. Cada una de ellas está específicamente creada para disfrutar de una variedad de este tipo de bebida. Por ejemplo, no se emplea la misma variedad de recipiente para consumir un tinto que un blanco o un espumoso. 

¿Y si nos imaginamos un buen momento con nuestros amigos o familiares? Un buen domingo por la mañana, saliendo a tomar un rico aperitivo. Este momento es ideal para la mayoría de las personas y, en muchos casos, podríamos estar acompañados de una buena copa de vino. Pero… ¿Siempre la misma? No, como ya hemos comentado, existen distintos tipos y variedades de estos recipientes para caldos. El artículo de hoy estará enfocado a repasar las distintas variedades disponibles y los distintos vinos con los que deben combinarse. 

Si te interesa saber más sobre este tema, te invitamos a que nos acompañes a lo largo de este artículo. ¿Comenzamos a explorar este maravilloso tema de opciones con los diferentes tipos de copas de vino?

 

¿Cuáles son las partes de una copa?

Todos sabemos, o al menos creemos saber, lo que es una copa. De ello no nos cabe la menor duda. No obstante, ¿eres capaz de identificar las distintas partes de una copa de vino?

A continuación, os las enseñamos, partiendo desde la parte más baja del objeto hasta la más elevada: 

•  Base: Suele presentar una forma circular a juego con la boca de la copa. No obstante, este elemento es totalmente variable, pues su función no depende de su forma, la cual se considera totalmente estética. De este modo, siempre se encargará de mantener en pie el resto de la estructura. Podrán verse también en forma de, por ejemplo, cuadrado. 
• Tallo: Este es el elemento encargado de unir la base y el cáliz. Si hablamos de una copa de vino, este debe ser largo. Esto se debe a que, de otro modo, nuestras manos pueden llegar a aumentar la temperatura del propio vino. También puede ser conocido como fuste. 
• Cáliz: Esta parte es la encargada de ejercer como contenedor para el vino. Puede ostentar distintas formas, las cuales estarán pensadas para realzar las propiedades aromáticas de la bebida. 
• Boca: Es la propia abertura situada en la parte superior de la copa. Su tamaño dependerá principalmente de la concentración aromática de la bebida. Estas dos variables son directamente proporcionales. Además, su forma permite dirigir correctamente la bebida hacia la lengua de la persona que degusta el caldo. 

Una vez que estamos más familiarizados con esta estructura, pasaremos a ver los distintos tipos para todas las bebidas. 

 

 

Copas y bebidas

Aunque más adelante nos vamos a centrar específicamente en aquellas copas destinadas al vino, primero haremos un repaso por las que existen para todo tipo de bebidas. Este resumen será breve, ya que el tema que hoy nos ocupa, es el vino. ¿Las repasamos?

 

Copa de agua

Esta se emplea para bebidas no alcohólicas y consideradas muy suaves. En este sentido, podemos hablar también de zumos y, principalmente, agua. Por norma general, esta variedad de copa suele presentar un aspecto muy fácilmente reconocible. El cáliz suele ser amplio, normalmente abombado o ensanchado en la parte central o baja. Por otro lado, el tallo puede tener una longitud variable, siendo algunos muy cortos y otros bastante largos. 

 

Copa para cata

Aquí encontramos un tipo de recipiente que ya se enfoca directamente hacia el vino. Su boca suele ser amplia, así como su cáliz. Esto se produce de esta manera para que el catador, la persona que prueba el caldo, pueda disfrutar al mismo tiempo de su aroma y su sabor. 

 

Copa de licor

Debido a la bebida a la que se destina, su capacidad suele ser bastante reducida. Su diseño suele ser muy variable. Por una parte, es posible encontrar copas que presente un fuste pequeño. No obstante, también es muy probable que estas presenten características distintas. Por ejemplo, su tallo puede ser más alargado y su cáliz más o menos ancho y con formas diferentes.

 

¿Una buena bebida en la copa de vino perfecta?

Una vez conocidas las variedades disponibles para las distintas clases de bebida, pasamos a revisar los tipos específicos de copa de vino. 

En primer lugar, os ofrecemos las características generales para los tipos de vino más extendidos y, posteriormente, hablaremos de forma más rigurosa de cada variedad: 

• Copas de vino tinto: Generalmente presenta un tamaño considerado grande. Su abertura es ancha y su cáliz ensanchado en la zona central y baja. 
• Copas de vino blanco: Con el objetivo de mantener la bebida a una temperatura más baja, sus dimensiones suelen ser menores que la anterior. 

 

Copa Borgoña

Este tipo de copa de vino presenta una forma muy característica. Su fuste suele ser bastante alargado para permitir que el catador realice movimientos para liberar los aromas del vino. Por otra parte, suele ser ancha en la parte inferior y poseer un amplio espacio en su cáliz. Este tipo de copa es empleada en vinos que necesitan una alta dosis de oxigenación. Es más redondeada que la copa de vino tinto clásica, ya que esta segunda suele tener forma de tulipán. 

Tanto la copa Borgoña como la copa clásica para vino tinto puede considerarse ideales para degustar vinos como Juana la Loca. Este presenta denominación de origen Jumilla, con grandes propiedades aromáticas y elaborado con uvas monastrell y cabernet sauvignon. 

Puedes consultar las distintas variedades de vino Juana la Loca haciendo clic aquí. 

Además, este tipo de copa de vino también es ideal para vinos Rioja. Si quieres saber más sobre estas añadas, te recomendamos la lectura del siguiente artículo: 

Contenido relacionado: Añadas Rioja: ¿Cuáles son las mejores?

 

 

Copa clásica para vino blanco

Aunque antes hemos expresado brevemente sus características. Ahora pasamos a explorarlas más a fondo. Podemos decir que su forma es generalmente amplia. Su base es grande y su tallo largo. Como hemos dicho, estas características permiten mover la bebida para disfrutar de su aroma. 

 

Copa jerez

Este tipo de copa de vino suele presentar una forma que recuerde a una silueta aflautada. El cristal que se emplea para su fabricación es más grueso que el del resto. Por este motivo, la temperatura propia de las bebidas se conserva fácilmente en su interior. 

 

Copa Chardonnay

La abertura de su boca suele ser bastante extensa y su cáliz presenta una forma achatada. Suele recomendarse para la ingesta de vinos blancos y dulces. Su tamaño suele ser pequeño en comparación con otras copas como la borgoña. 

 

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Esperamos que la información que te hemos ofertado sea para ti útil e interesante. Así como que te acerque un poco más al gran mundo del vino. ¡Nos veremos en el siguiente artículo!